miércoles, 14 de junio de 2017

QUIERE AL QUE TE CUIDA

¡Hola amigos!, ¿qué tal vuestros corazones?
Espero que agradecidos por haber puesto en práctica alguna de las recomendaciones dadas en esta sección de “El rincón de la salud” con el tema que iniciamos hace tiempo de “aprendamos a cuidar nuestro corazón”.
Y espero que el resto del cuerpo no se ponga celoso por esto de insistir tanto en el corazón, pero, ¿qué mejor que tener a punto el motor que procura el sustento de todo el organismo?; por otro lado, cualquier mimo que se le proporcione a cualquier parte de nuestro cuerpo, seguro que beneficia a la salud de nuestro corazón; si, así somos de solidarios por dentro, en lo bueno y en lo malo.
A menudo me he referido a enfermedades cardíacas, y también a enfermedades cardiovasculares, y aunque con frecuencia se piense que son el mismo padecimiento las enfermedades cardiacas y cardiovasculares son distintas e involucran a diferentes partes del cuerpo.
Enfermedad cardiaca.
Cundo falla el motor, o sea, el corazón o sistema de vasos sanguíneos del corazón, recordemos, las coronarias, las arterias que rodean a este como si fueran una corona coronando a un rey, hablamos de enfermedad cardiaca.
La enfermedad cardiaca se refiere únicamente a las enfermedades del corazón y del sistema de vasos sanguíneos del corazón.
Enfermedad cardiovascular
La enfermedad cardiovascular se refiere a las enfermedades del corazón y a las enfermedades del sistema de vasos sanguíneos (arterias, capilares y venas) de todo el organismo, tales como el cerebro, las piernas y los pulmones.

“Cardio “se refiere al corazón y “vascular” al sistema de vasos sanguíneos.

Las enfermedades cardiovasculares engloban pues distintas patologías, las que afectan al corazón y también las que afectan a otros órganos como el cerebro o el riñón. Las más frecuentes en España son la hipertensión (tensión alta) y la hipercolesterolemia (colesterol muy alto), que suponen la principal causa de muerte, por delante del cáncer.
En los últimos años, la incidencia de las enfermedades cardiovasculares en nuestro país ha aumentado, al mismo tiempo que disminuye la edad de inicio.


Numerosos factores inciden en el desarrollo de las enfermedades cardiovasculares. Algunos de estos. Como la edad, el sexo y la herencia genética no se pueden modificar. Sin embargo, otros como la hipertensión arterial, el tabaquismo, el colesterol elevado, la diabetes, la obesidad, el sedentarismo, el stress y el abuso de alcohol son susceptibles de ser modificados adoptando un estilo de vida saludable.
Ya he comentado en ocasiones anteriores sobre alguno de estos aspectos, pero aun nos queda más por aprender sobre cuidar nuestro corazón.
PORQUE NOS LO DEBEMOS Y NOS LO MERECEMOS, CUIDEMONOS.


                                                                                                         Mª Jesús Abenza Ruiz

2 comentarios:

  1. Si, hay que cuidarse. Vida saludable, ¡qué importante es!

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  2. Me parece muy bien María Jesús, que te cuides ese corazón pues solo tenemos uno, y que nos animes a los demás a seguir tu ejemplo, pues como se dice, "no se sabe lo que se tiene hasta que se pierde.
    Juan Carlos.

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