lunes, 21 de mayo de 2018
un personaje
Francisco Uro es un tipo duro, es un caballero con tu dinero,le gusta lo más duro, le gusta lo más puro; no para hasta que se gasta hasta el turulo, la pasta base hace que se le pase el ansia media hora. Usa linimento porque le huele el aliento, juro que no miento que su mujer ni le besa cuando sale del servicio y le deja la sorpresa. Casados por la iglesia y por el vicio en la sacristía de su mala cabeza en la catedral de Siguenza por todo lo alto cuando heredó a la abuela que se murió por pereza en la más pura indigencia con las monjas del asilo. En el cajero siempre hay dinero a mano con la tarjeta del hermano que no pare la juerga. Y al viejo regalos del outlet de los pobres y el viejo agradecido sólo tiene que firmar abajo; el dinero no cuesta trabajo más que darle a la sin hueso. El viejo dice: del viejo el consejo y Francisco dice: donde dice dije digo Diego y me gasto tu dinero en un viaje si yo quiero. Tiene siempre un as en la manga, es amigo del presidente de los billetes de veinte que salen de cinco en cinco casi todos los domingos. El día de fin de año fiscal como buen criminal cuenta billetes rosas, siempre salen bien las cosas cuando pagan los demás. El dinero ni se crea ni se destruye, sólo cambia de manos. El viejo cena sopas y Francisco sushi en Amparito Roca; después llama al telecoca y de postre viagra con la receta del hermano demente que se perdió en la mudanza con un pasaporte rumbo a Méjico lindo y querido. El premio gordo se lo lleva el que acierta los goles del balón de oro o cuántas gotas de lluvia caerán en la tormenta.